A la casita de barro la demolió la Muni «por seguridad»
La Municipalidad de Centenario salió a aclarar que tuvo que demoler parte de un aula de barro, instalada en la chacra municipal por un grupo de bioconstructores, debido a que representaba un riesgo.
Lo aseguró ayer Tanya Bertoldi, secretaria de Gobierno, quien se reunió con el técnico Alfredo Urrutia, capacitador del Centro de Formación Profesional Agropecuario N° 2 de San Patricio del Chañar (CFPA 2).
«Pensando desde la capacitación, estamos de acuerdo, pero como institución también tenemos que cumplir con las ordenanzas que rigen las construcciones privadas y públicas dentro del ejido municipal, que es nuestro código de edificación», dijo la funcionaria.
El aula fue construida por vecinos que asistieron a un taller durante la gestión del ex intendente Esteban Cimolai, y uno de los ejes fue presentar un proyecto para modificar el Código de Edificación, que prohíbe utilizar materiales como adobe para construir, como tienen otras localidades progresistas.