En Neuquén, el MPN pide que Nación garantice el funcionamiento de la PIAP
El acuerdo con el Estado Nacional establecía una partida de $ 20 mil millones por un plazo de 25 meses orientados a poner en marcha el complejo ubicado en Arroyito.
Desde que llego al poder el reciente gobierno de Javier Milei la falta de presupuestos y el recorte de la obra pública por parte del Estado Nacional se hizo visible en varios sectores, en especial en el sector nuclear, donde hoy existen importantes proyectos con de un gran avance que se encuentran paralizados. Entre los más afectados por recortes presupuestarios figuran los reactores CAREM, RA-10 y la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP).
Recientemente, frente a la falta de financiamiento de la PIAP, legisladores del bloque del Movimiento Popular Neuquino (MPN) hicieron presente un proyecto de comunicación para que desde el gobierno nacional se asegure el respaldo presupuestal necesario que permita iniciar los trabajos de el estado de preservación y mantenimiento de la planta.
En diálogo con un medio de la capital neuquina, Patricia Fernández, diputada provincial por el MPN, explicó que «días atrás solicitamos al Estado Nacional se garantice la ejecución porque hay un convenio firmado mayo 2023 para la conservación, mantenimiento y acondicionamiento y la puesta en marcha de la planta entre la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería Sociedad del Estado (ENSI).
El presente acuerdo expresa una partida de 20 mil millones de pesos por un plazo de 25 meses destinados a volver a activar una producción que se encuentra estancada desde el mes de junio de 2017.
En este punto, la iniciativa aclara en sus fundamentos respecto a la necesidad de tener certeza sobre su puesta en marcha o, en su defecto, organizar y garantizar acciones tendientes para poder ampliar su matriz productiva y reconvertirla para la elaboración de otros productos.
«Ante la falta de actualización presupuestaria hay una gran incertidumbre entre los más de 120 trabajadores que trabajan en la planta, entre ellos ingenieros y técnicos y personal altamente capacitado que hoy corren riesgo de perder sus fuentes de trabajo», expreso la diputada por el MPN Patricia Fernández, y aclaró que en la actualidad sólo se están pagando salarios y haciendo tareas de mantenimiento.
«La planta de la PIAP, que está en condiciones de producir 200 toneladas y con un potencial exportador importante, está literalmente paralizada y no sabemos cuándo ni cómo vamos a continuar con la puesta en marcha», menciono.
Hace menos de dos meses, a través de una carta enviada a la Secretaría de Energía, Adriana Serquis, quien presentó su renuncia el 10 de diciembre de 2023 a la presidencia de la CNEA, advirtió sobre la difícil situación financiera que atraviesa esta entidad.
La ex funcionaria se expreso en forma de critica la falta de respuesta por parte del Gobierno, que en lo que va del año apenas envió el 11% del presupuesto asignado.
«No somos la excepción de lo que ocurre en la mayoría de las empresas del Estado», expresó. Y refirió que la problematica no sólo es la falta de presupuesto, sino la ausencia de previsibilidad.
Sobre el estado de situación de las obras de la PIAP señalo que «en principio para la puesta en marcha de una de las líneas de producción se había firmado un convenio en mayo del año pasado donde se había fijado un cronograma que la planta entraría en producción en junio de 2025. Obviamente todos estos retrasos presupuestarios hacen prever que habrá que hacer alguna adenda para ajustar los plazos».
La Planta Industrial de Agua Pesada, con ubicación en Arroyito, provincia de Neuquén, surge hoy como un pilar clave no sólo para garantizar el insumo para las centrales locales, sino que también para venderlo al exterior donde hay naciones que muestran mucho interés como el caso del país norteamericano, Canadá.