Llegan tiempos de buenas noticias

La justicia neuquina, por pedido de fiscalía y ante la falta de pruebas (sobreseimiento por inexistencia de delito), declaró la caída de la acusación mediática contra la Comisión Directiva y el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra.

Este fallo es una evidencia palmaria del funcionamiento de las cloacas pestilentes de los servicios de inteligencia paralelos del gobierno de Mauricio Macri, cuyo presunto cabecilla es el procesado fiscal Carlos Stornelli,  y de la complicidad de los pseudoperiodistas: el escribidor Italo Pisani y el lenguaraz Carlos Eguía. “Quienes amparados en las faldas de Elisa Carrió y del espía Carlos D´Alessio se dedicaron a difamar a mí, a mi familia y los trabajadores con inventos rídiculos e infundados”, dijo Pereyra.

“Ni triangulación ni defraudación ni sobresueldos, y así cada invento infame de esta gente, y las cloacas del entonces presidente Macri, se caerá irremediablemente. De ninguna manera podrá detener el trabajo orgánico de nuestro sindicato que trabaja en defensa de sus afiliados y del bienestar de sus familias”, agregó.

Las operaciones de prensa y de los servicios quedaron al descubierto, al punto que fueron los fiscales quienes pidieron el sobreseimiento de todos, incluyendo a los dirigentes Ricardo Astrada, Omar Lorenzo, Osvaldo Marín y Jorge Allende.
“Los que venían a cambiar las cosas mintieron y se valieron de los servicios estatales para ensuciar a quienes se oponía a su voracidad especulativa. La miseria quedó a la vista”, apuntó Pereyra.

“Nuestro sindicato ha trabajado orgánicamente, lo que nos ha permitido tener una economía saneada que paga puntualmente a médicos y empleados a pesar de las crisis; pelear por los puestos de trabajo y el salario. Nada nos va a apartar de este camino, ni siquiera estas operaciones de baja estofa”, concluyó.