Tras cinco meses, se reanudaron los juicios presenciales

Con la implementación del estricto protocolo aprobado por Salud a comienzos de mes, se llevó a cabo el primer juicio presencial en pandemia. La jornada estuvo dedicada a la determinación de pena para un homicida declarado culpable a principios de año. Lentamente pero con paso seguro, la Oficina Judicial avanza con los agendamientos.

La audiencia presencial convocada ayer por la mañana, que sirvió como primera prueba de los lineamientos ideados para retornar a la actividad normal cuidando la posibilidad de contagios, tenía como objetivo fijar la pena de prisión a cumplir por Guillermo Piutrin Tarifeño, responsable del «crimen del hincha de River», Nicolás Moraga, ocurrido en el barrio Villa Ceferino en noviembre de 2018.

A pesar de que en primera instancia se había hablado de una disputa futbolera en la vía pública, dicha hipótesis no fue acreditada. Siguiendo la hipótesis probada por la fiscalía, victima y victimario tuvieron un altercado al cruzarse en la calle cuando Moraga iba a bordo de su bicicleta y el acusado en su moto. Tras intercambiar insultos, Piutrin abandonó el lugar a bordo de su moto, dejó a su hijo en la vivienda de su madre y retornó a las inmediaciones en busca de Moraga.

Al encontrarlo, el asesino efectuó al menos cinco disparos, tres de los cuales impactaron en distintas partes del cuerpo de la víctima y uno de ellos resultó mortal.

Ya habiendo atravesado el juicio que lo declaró culpable, solo quedaba que se determine el plazo a cumplir tras las rejas para Piutrin. Sin más alegatos, la fiscalía solicitó 13 años de prisión efectiva. La defensora Ivana Dal Bianco sostuvo la inocencia de su defendido, pero aún así sugirió la pena mínima para la calificación otorgada, de 10 años y ocho meses.

La resolución de los jueces se conocerá esta mañana.